DAME UN MOTIVO PARA CAMBIAR DE CONDUCTA
"Dame un motivo para cambiar de conducta"....así quiero empezar éste ensayo, porque esa es mi gran preocupación ¿Cuanto aportamos como sociedad, como profesionales, como gobierno para lograr verdaderamente un cambio en la conducta de los privado de libertad?
Muchos quizás cuestionarán mi manera de enfocar el tema, alegando que son delincuentes que deben ser sancionados penalmente, que para eso existe el Juez y la Ley, aunado a la creación del Sistema Carcelario para velar por el cumplimiento de las penas, hecho cierto; que yo como abogada litigante y joven profesional no contradigo.
Ahora bien, comparto que todo aquel que infringe la Ley debe ser sancionado; sin embargo, como litigante y conocedora de la crisis que pasa en la actualidad el Sistema Carcelario panameño es que llevo sobre mi saco de abogada, sobre mi juventud gran preocupación por los muchos problemas internos de las cárceles panameñas, con ello no digo que sus funcionarios no hagan su trabajo, muy por el contrario soy testigo del esfuerzo y dedicación de los funcionarios en los distintos departamentos del Sistema Penitenciario, iniciando por la Dirección Nacional, Tratamiento, Relaciones Públicas, Asesoría Legal entre otros departamentos; pero no es suficiente la pasión de ellos y el interés de algunos profesionales que nos preocupa el tema "necesitamos muchos más".
Preguntas como las siguientes:
¿Qué busca nuestro sistema carcelario? esa es mi gran interrogante ¿Tenemos una visión clara en Panamá del verdadero rol que debe cumplir el Sistema Carcelario? ésta letrada es de la opinión que no estamos manejando la crisis, como un tema social de Estado, que debe ir encaminado a buscar "UN CAMBIO DE CONDUCTA" en el modo de vida del privado de libertad, lo ocurrido en el Centro de Cumplimiento de Menores, es muestra evidente de un sistema colapsado, que no tiene ni cuenta con los recursos para enfrentar la verdadera responsabilidad que tenemos frente al Sistema Penitenciario; contamos con una Ministra que tiene el deseo, el conocimiento y la experiencia apoyémosla como sociedad, como profesionales y hagámosle el llamado al gobierno de turno, para que el tema penitenciario sea prioridad en su agenda "Que Dios nos ayude”, porque será un proceso de transformación, pero con fe, pasión, y deseos de ver cárceles dignas de un sistema carcelario sin violación a los derechos humanos, cumpliendo con los principios que establece la Constitución panameña, la Ley y los Tratados y Convenios Internacionales lo lograremos.
Recordemos que cuando un detenido o privado de libertad entra a un centro carcelario entra a cumplir una pena que lo priva de su libertad, pero la sentencia que haya emitido el Juzgador no le ha restringido una serie de derechos innatos del ser humano que deben ser respetados por el Estado, y también por la sociedad.
¿Cuales son algunos de esos derechos?
1) La salud: no contamos con un sistema penitenciario que ofrezca a sus privados de libertad la oportunidad de tener a lo interno de los centros penales la cantidad de médicos y demás profesionales necesarios, así como tampoco el equipo que se requiere; preocupante verdad; prueba de ello visitemos la clínica con que cuenta la Joyita, La Joya o en cualquiera de nuestras cárceles a nivel nacional.
2) El sistema de visitas: es deficiente no contamos con un sistema moderno para llevar un control de visitas, por eso es que los familiares de los detenidos viven una verdadera agonía cada vez que visitan los distintos Centros Penitenciarios, ejemplo de ello: sabía usted que si llegara a tener un familiar privado de libertad en La Joya o La Joyita para entrar debe usted alquilar un suéter de color rojo, alquiler que usted debe pagar, debe madrugar para lograr entrar el día que le toca de lo contrario podría no tener suerte.
3) Estructura física de las cárceles panameñas: ha observado usted la condiciones físicas de las cárceles en Panamá, deprimentes no tienen sinónimo de "resocialización" y menos de cambio de conducta; tema que a mi criterio debemos abordar "démosle un sitial diferente al Sistema Penitenciario" y es a través de estos escritos, y de la manera en que abordemos el tema en que podremos aportar al cambio y trasformación del sistema.
4) Hacinamiento carcelario: sin duda alguna preguntémonos cuantos detenidos duermen, desayunan, almuerzan y cenan, hacen sus necesidades fisiológicas en una misma celda.
5) Programas de Resocialización: no negamos que son algunos los programas que se han implementado los cuales aplaudimos, pero hay muchos más que debemos llevar al Sistema, porque la finalidad es cumplir en primer lugar con los principios constitucionales, el tema que abordamos no es un tema fácil de manejar ni de interpretar tampoco, pero la norma supra es clara cuando habla en su artículo 28 de seguridad, rehabilitación y defensa social, principios muy profundos, pero interesantes. Ejemplo de lo que considero, aunado a todo lo anterior, violaciones a los derechos de los privados de libertad:
Lo ocurrido en el Centro de Cumplimiento de Menores, ubicado en Tocúmen hecho que nunca debió ocurrir, se trataba de jóvenes panameños que cometieron delitos "sí", pero estaban cumpliendo su sanción penal, a quien culpamos por su conducta, al núcleo familiar, a la delincuencia, ¿A quién culpa usted? ¿Qué hacemos nos quedamos buscando culpables o trabajamos en aportar para que ése joven "Cambie de Conducta" esta letrada es del criterio que debemos y estamos en la obligación como Estado, como Gobierno, como profesionales, como abogados litigantes que vivimos el problema carcelario por el trabajo que realizamos, debemos ser voceros, instrumentos de cambio aportando nuestras ideas, propuestas, que mejoren el sistema y cambien la mentalidad de aquel sector de la población que aún no cree que vale la pena aplicar los principios de rehabilitación del detenido.
6) Aumento de personal Miembros de la Fuerza Pública y Custodios: se requiere y es necesario, observe usted será posible que hoy día llega un abogado a visita de detenido y funcionarios del sistema tengan que comunicarle licenciado tendrá usted que esperar (y agrega la escritora esa espera no sabemos de cuánto tiempo es) porque no hay custodios; de quien es la culpa de los funcionarios no, es de un sistema inoperante que colapsó.
7) Seguridad dentro de los penales: ¿Por qué cree usted que se dan tantas fugas de privados de libertad?, bueno no hay un sistema de seguridad acorde con la población penitenciaria que manejamos; necesitamos visión frente al tema pensemos en grande solo así lograremos la trasformación que tanto se requiere.
8) Mano de obra en las cárceles: Esta letrada considera que tenemos nuestras cárceles llenas de privados de libertad, por lo tanto, tenemos una mano de obra que desaprovechamos lamentablemente las administraciones que han pasado no han explotado ese elemento tan fundamental para incentivar al detenido al cambio de conducta que buscamos.
De todo lo expuesto, observamos que muchas son las deficiencias a las que nos enfrentamos, es grande el trabajo para lograr el objetivo, pero con amor al tema, con pasión, y gente que crea en la visión… de seguro se obtendrán frutos a largo plazo, en otra oportunidad ampliaremos lo aquí comentado; esperamos que éste ensayo haya servido como motivación para que le demos al tema la importancia que merece socialmente.
Atentamente.
Licda. Mirna A. Nieto
6690-3342
395-4215/4216
